Wheaton Bible Church
27W500 North Ave, West Chicago, IL 60185
Es un día en el que nuestra familia de la iglesia se une para dar una ofrenda «extraordinaria» es decir, que va más allá de nuestras contribuciones regulares, designada para nuestro campus. También es un momento en el que reflexionamos sobre la asombrosa fidelidad de Dios. Hace quince años, nuestra iglesia se mudó a nuestro campus en North Avenue. El período para dar tu ofrenda extraordinaria es del 17 de septiembre al 7 de octubre. Nuestro sueño entonces, como ahora, no era de ladrillos y edificios, sino de alcanzar a más personas para Jesús. Se trataba y se trata de ser una plataforma para lanzar y ampliar el alcance de nuestros ministerios para compartir el Evangelio tanto a nivel local como global.
Si te perdiste el mensaje del Domingo de Generosidad del pastor Hanibal el 17 de septiembre, vea el resumen a continuación.
Considera en oracíon estos pasos mientras preparas para el Domingo de Generosidad:
Nuestras ofrendas extraordinarias serán dirigidas por nuestra junta de ancianos hacia dos oportunidades.
1. REDUCCIÓN DEL CAPITAL DEL PRÉSTAMO
Es nuestro deseo reducir nuestra deuda del campus y liberar fondos futuros para su uso en el ministerio. Hemos pagado el 89% de nuestro terreno, edificios y equipo. En 15 años, hemos reembolsado $15.7 millones de nuestro préstamo inicial, casi el 70%, como resultado de dona- ciones generosas y la gestión de nuestros gastos y finanzas. ¡Nos queda menos de $6.8 millones!
Nuestro préstamo actual consta de tres partes con una tasa de interés combinada del 4.60%.
Nos hemos beneficiado de tasas de interés históricamente bajas, lo que ha mantenido bajo el costo de los fondos prestados. Sin embargo, no hay garantía de que, al renovarse los préstamos, en 2025, 2027 y 2029, las mismas tasas bajas estarán disponibles.
Por cada $1000 que reducimos del préstamo, ahorramos $400 en intereses durante el período del préstamo. Nuestro requisito presupuestario anual se reduce por cada dólar que reducimos de la deuda.
La iglesia no es un edificio, son las personas, y el edificio es una herramienta. Una herramienta que crea espacios para interactuar el compromiso con el Señor y para con las personas.
Debido a que esto es lo primero que la mayoría de nuestros invitados experimentan al entrar al edificio, es fundamental que nuestro atrio dé la impresión correcta y comunique a nuestros invitados qué tipo de comunidad van a experimentar.
Necesitamos crear espacios relacionales intencionales que faciliten la conexión y el discipulado, ya sea una conversación de 5 minutos o una hora.
Queremos renovar y actualizar nuestro Centro de Alcance Global para reflejar mejor nuestro compromiso masivo en el Gran Mandamiento y la Gran Comisión. Con 93 unidades misioneras sirviendo en 52 naciones, y con nuestra creciente presencia en países altamente perseguidos, de acceso cerrado y seguros a través de Líderes Nacionales Estratégicos, necesitamos ampliar las formas en que nuestra familia de la iglesia se involucra con los testimonios e historias de cómo Dios está trabajando en las naciones.
Deseamos convertir nuestro Centro de Alcance Global en un espacio multigeneracional.
Esto creará un recurso enfocado para equipar a nuestra iglesia y ayudarles a ver su parte en alcanzar al mundo a través de la entrega y el servicio.
Al dar generosamente, podemos reducir significativamente nuestra deuda y acelerar nuestro avance en el cumplimiento de nuestra visión para el ministerio.
¿Tienes Preguntas? Visita la sección de Preguntas Frecuentes o contacta Scott Landon 630.876.6621,
Si puedes responder «sí» a estas preguntas, entonces puedes sentirte en paz con la cantidad de tu ofrenda. Si no puedes responder honestamente «sí» a las tres preguntas, vuelve a recorrer estos pasos hasta que te sientas en paz con tus respuestas.
Si estás casado, se les anima a ti y a tu cónyuge a seguir estos pasos por separado. Luego, reúnanse y compartan las cantidades de sus ofrendas. Si cada uno llega a diferentes cantidades, repitan los pasos 1 al 3 por separado y vean si hay un acuerdo cuando se vuelvan a reunir por segunda vez. Si no lo hay, elijan el número más bajo.
4. Confía y obedece al Señor al dar tu ofrenda para el Domingo de Generosidad
ORACIÓN
La oración lo inicia todo. Nada prepara nuestros corazones para responder a Dios como buscar Su corazón a través de la oración. No apresures este proceso. Cuanto más ores «Dios, muéstrame cómo dar», más formas Dios te mostrará.
PROPORCIONAL
Tu ofrenda no se trata de cantidad; se trata de fe y obediencia. Uno de los principios rectores detrás de esta oportunidad es la igualdad de obediencia, no la igualdad de ofrendas. Todas las ofrendas en la Biblia eran proporcionales porque Dios nos ha dado diferentes cantidades de recursos. Dios está interesado en nuestros corazones, no en nuestras cantidades.
AGRADABLE
Este proceso se trata de buscar una decisión de compromiso que sea agradable a Dios. Para la mayoría de nosotros, es fácil encontrar lo que nos complace. Pero para encontrar lo que complace a Dios, tendremos que ejercitar nuestra fe a través de la oración y la guía del Espíritu Santo.
¿Es mi compromiso agradable a Dios? Hazte estas preguntas:
PAZ
Cuando sabemos que hemos dado una ofrenda en oración y que es proporcional, una que es agradable a Dios, Él nos concederá una paz que «sobrepasa todo entendimiento». Las personas experimentan esto de diferentes maneras. A menudo viene a través de una palabra o situación confirmatoria después de haber tomado una decisión. En otras ocasiones, es una sensación general de contentamiento, al saber que estamos siguiendo la voluntad perfecta de Dios.
Nuestra misión es amar a Dios, amarnos los unos a los otros, amar a nuestro prójimo y amar a las naciones. La generosidad extravagante requiere una confianza del tamaño de Dios. Para lograr eso, cada uno de nosotros tendrá que ir más allá de donde estamos ahora, hacia donde Jesús nos llama. El DOMINGO DE GENEROSIDAD nos llama a todos a participar. Solo podremos liberar fondos para oportunidades estratégicas de ministerio si
Deseamos que el 100% de nosotros busque a Dios, vaya más allá de donde estamos hoy y ponga a Jesús en primer lugar en nuestros corazones y en todas las áreas de nuestras vidas. El Evangelio nos impulsa a muchas cosas, y una de las más importantes es la generosidad extravagante. Así como Cristo derramó su generosidad por nosotros en la cruz, debemos derramar nuestras vidas como una ofrenda para Él y para los demás. La única forma en que esto cambia es a través de la transformación del corazón.
Creemos que Dios no solo nos llama a ser generosos; nos llama a dar nuestros siguientes pasos de fe más allá de donde estamos hoy, a dar generosamente y a confiar más en Él.
«Que cada uno dé como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría. Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para ustedes, a fin de que teniendo siempre todo lo suficiente en todas las cosas, abunden para toda buena obra» (2 Corintios 9:7-8).
Primero, ora y busca la guía de Dios sobre lo que Él te está pidiendo que hagas. Prepara tu corazón para escucharlo y para oír lo que Él dice. Está dispuesto a dar un paso de fe. Servimos a un Dios increíble que quiere guiarnos. Sigue Su dirección y prepárate para sorprenderte más de lo que puedas imaginar.
Segundo, participa plenamente en el DOMINGO DE GENEROSIDAD.
Mientras adoramos juntos, nos conectamos en comunidad e invertimos en otros, únete de corazón con nosotros para la próxima temporada en la vida de esta iglesia que amamos... y crezcamos en confiar más en Dios.
Designas tu ofrenda extraordinaria a través de la donación en línea o usando el sobre especial de donación. Tu ofrenda se destinará a la reducción del principal del préstamo y las actualizaciones del campus. El período para dar tu ofrenda extraordinaria es del 17 de septiembre al 7 de octubre
No hemos establecido una meta financiera para la donación de confianza. En nuestros seis domingos anteriores de OFRENDA DE CONFIANZA, el pueblo de Dios generosamente donó $7.8 millones. La cantidad que recibamos acelerará la reducción de la deuda y financiará las actualizaciones del campus, lo que indirectamente impulsará los ministerios en curso y nos permitirá aprovechar nuevas y mayores oportunidades de difusión del Evangelio. Al dar generosamente, podemos reducir significativamente nuestra deuda y acelerar el avance en el cumplimiento de nuestra misión.
En primer lugar, nos sentimos impulsados por un sentido de urgencia. Dios nos ha dado aliento y vida, así como Su Espíritu. Como Su Iglesia, queremos ser libres para obedecer audazmente Su llamado de alcanzar a más personas que no lo conocen. Segundo, desde nuestra reubicación hemos obtenido beneficios de tasas de interés históricamente bajas, lo cual ha mantenido el costo de los fondos prestados bajo. Nuestras actuales tasas favorables de deuda obtenidas hace un año se restablecerán el 1 de septiembre de 2025, 2027 y 2029. Sin embargo, no hay garantía de que al renovarse los préstamos, las mismas tasas bajas estén disponibles.
Nos gustaría comenzar el diseño y comenzar el trabajo el próximo verano. El momento dependerá de la cantidad recibida.
Si bien no todos podemos dar la misma cantidad, todos podemos sacrificarnos juntos. Se trata de un sacrificio equitativo, no de cantidades iguales. Tu participación, en cualquier nivel, ayudará a cambiar vidas. Nuestros regalos ayudarán a más personas, así como alguien en el pasado nos ayudó a nosotros. Todas las ofrendas son bienvenidas, independientemente de su tamaño, reconociendo que para algunos una ofrenda pequeña puede representar una parte de sus ingresos o riqueza que es igual a una ofrenda mucho más grande de otra persona. Esperamos que todos sean lo más generosos posible.
«Pero así como ustedes abundan en todo: en fe, en palabra, en conocimiento, en toda solicitud, y en el amor que hemos inspirado en ustedes, vean que también abunden en esta obra de gracia» (2 Corintios 8:7).
¡Estamos emocionados de que estés aquí y te invitamos a asociarte con nosotros! Creemos que la iglesia local es el plan de Dios para conformarnos a la imagen de Cristo, alcanzar a nuestra comunidad y llevar el evangelio a las naciones. Nos encantaría que hicieras de WBC tu hogar. ¡Te necesitamos en nuestro equipo! Descubre cómo puedes conectarte visitando wheatonbible.org.
¡Si nunca has dado financieramente a WBC, el DOMINGO DE GENEROSIDAD es para ti! DOMINGO DE GENEROSIDAD es cuando se te pide que des una ofrenda adicional «por encima y más allá» de tu donación regular. DOMINGO DE GENEROSIDAD reconoce que todos en la iglesia están llamados a dar generosamente y sacrificialmente. DOMINGO DE GENEROSIDAD no es solo para «súper donantes»; es para todos nosotros. Es un llamado a la generosidad extravagante centrada en el evangelio para todos. Si nunca has dado antes, esta es tu oportunidad de unirte a nosotros a través de la generosidad alegre y comprometida.
Sé creativo/a mientras exploras formas en las que tu hogar puede dar una OFRENDA DE CONFIANZA. Es posible que tengas acciones, propiedades u otros recursos almacenados. Dios podría estar llamándote a dar de esos recursos durante este tiempo. Por favor, avísanos si necesitas ayuda para facilitar donaciones de propiedades o acciones. Estaremos encantados de ayudarte con eso. Para obtener más información, contacta a Russ Van Der Vliet en nuestra Oficina de Finanzas al 630.876.6625 o a
De hecho, muchas personas que asisten a Wheaton Bible Church/Iglesia del Pueblo no son miembros. Eso es muy común para una iglesia bíblica independiente. Nuestro objetivo es lograr una participación del 100 por ciento de todos aquellos que consideran Wheaton Bible Church/Iglesia del Pueblo su «hogar» eclesial.
No todos podemos dar la misma cantidad, pero todos podemos tener una parte. Todas las ofrendas son bienvenidos y necesarios, sin importar su tamaño. Reconocemos que para algunos, un regalo pequeño puede representar una porción de ingresos que es igual a un regalo mucho más grande de otra persona. Puede ayudarte a pensar en términos de obediencia y sacrificio iguales, no necesariamente en cantidades iguales. Cómo administramos nuestros recursos, nuestro tiempo, nuestro talento y nuestro tesoro, refleja en qué realmente nos importa. Como Jesús dijo en Mateo 6:21: «Donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón».
La OFRENDA EXTRAORDINARIA se trata de tu generosidad total, radical y sacrificial para la misión de Dios en nuestra iglesia. Creemos que Dios nos llama a la acción en tiempos de dificultad tanto como lo hace en tiempos de abundancia, y eso se ve diferente para cada persona.
El DOMINGO DE GENEROSIDAD se trata de un cambio de corazón, que solo se logra al rendir completamente nuestras vidas a Dios en esta área de dar. Él nos invita a aprender de Su fidelidad a través del dar, por lo que nos encantaría que todos sean parte de esta temporada de impulso espiritual en Wheaton Bible Church. Tu OFRENDA EXTRAORDINARIA puede no ser tanto como quisieras o desearías, pero cada ofrenda marca la diferencia y es valiosa en el plan de Dios.
Si estás haciendo pagos para saldar tus deudas en este momento, te felicitamos por el progreso que estás haciendo. Y debes continuar haciéndolo. La Biblia no enseña necesariamente que debemos retener nuestras ofrendas hasta que estemos libres de deudas. Dar no se trata de lo que Dios quiere de ti; más bien, se trata de lo que Dios quiere para ti. Cuando honramos a Dios responsablemente con nuestras ofrendas primero, Él promete involucrarse en cada otro aspecto de nuestras finanzas.
Saber que debemos dar puede ser fácil, pero saber cuánto dar presenta un desafío mayor. Dios siempre ha pedido a su pueblo que le devuelva las «primicias» de su provisión. A lo largo del Antiguo Testamento, esto se manifestaba en forma de diezmo.
Aproximadamente 400 años antes de que se diera la Ley, tanto Abraham como Jacob le ofrecieron al Señor un diezmo de todo lo que Él les había dado. La palabra «diezmo» simplemente significa «una décima parte». En respuesta a la provisión y la promesa de Dios, estos héroes de la fe no solo ofrecieron al Señor una décima parte de sus ingresos, sino una décima parte de todo lo que Dios les había dado.
La Ley codifica el principio de dar un diezmo, pero también permite ofrendas de paz y ofrendas voluntarias al Señor. ¡Incluso la Ley animaba al pueblo de Dios a superar los requisitos mínimos de la Ley!
Cristo cumplió la promesa de la Ley. Esto no nos da una excusa para dejar de dar una décima parte; más bien, debería motivarnos a dar en respuesta agradecida a Dios. Él cumple su promesa y nos permite disfrutar de ser parte de su plan para satisfacer las necesidades de su pueblo. En los Hechos, la Iglesia no permitió que una interpretación legalista del diezmo limitara su generosidad. En cambio, vieron las inmensas necesidades entre el Cuerpo de Cristo y dieron en consecuencia.
En resumen, "dar los primeros frutos" es un principio bíblico universal. El diezmo es un buen punto de partida para muchos creyentes, pero no es necesariamente un lugar para quedarse. El principio que nos guía al dar es el siguiente: «Porque conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que siendo rico, sin embargo por amor a ustedes se hizo pobre, para que por medio de Su pobreza ustedes llegaran a ser ricos» (2 Corintios 8:9).
El Rey de Reyes dejó el Cielo para dar su vida. Si lo ponemos primero en nuestras vidas, ¿cómo se reflejará esto en nuestra forma de dar?
Pablo está tan preocupado por nuestra tendencia a separar nuestra forma de dar de nuestra vida cristiana que nos exhorta a sobresalir en la gracia de dar (2 Corintios 8:7). Dar es una parte esencial de la vida cristiana.
La iglesia menciona el dinero porque frecuentemente es un obstáculo espiritual en nuestras vidas. Nuestras finanzas nos dan una falsa sensación de seguridad que solo debería venir de Dios. Traer esta área de nuestras vidas bajo su control es simplemente de vital importancia para cada creyente. Jesús dijo claramente que no podemos servir a Dios y al dinero.
Jesús nos dice: "Donde está tu tesoro, allí estará también tu corazón" (Mateo 6:21). ¿Dónde estamos invirtiendo nuestro tiempo, nuestros talentos y nuestro tesoro? Jesús nos diría que las respuestas a esas preguntas revelarán todo lo que necesitamos saber sobre dónde está nuestro corazón. Oremos los unos por los otros, para que todos pongamos a Jesús en primer lugar, porque ese es el único lugar donde Él debe estar legítimamente.
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